El color es uno de los elementos más poderosos de que disponemos a la hora de comunicar emociones en un sitio web. La mayoría de estas emociones son percibidas de un modo sutil e inconsciente.
También es cierto que el color es un arma de comunicación, pudiendo también prescindir. Hay periódicos, películas, fotografías y hasta páginas web en blanco y negro que cumplen sobradamente su objetivo y que incluso pueden ser estrictamente impactantes.
El color es subjetivo: cada persona, dependiendo de sus rasgos culturales y sociales, su estado de ánimo u otras circunstancias personales lo va a hacer interpretada de manera distinta.
El color tiene tres dimensiones básicas:
Tono, saturación y luminosidad.
Tono: Se trata de la propiedad que hace distintos a los colores entre sí. Los primarios son el amarillo, el rojo y el azul, siendo el verde, naranja y violeta los secundarios.
Saturación: Es el grado de pureza de un color con respecto al gris. Por ejemplo, los pantalones vaqueros tienen un azul menos saturado después de unas cuantas lavadas.
Luminosidad: Indica cuan brillante es un color.
